La
Librería de El Sueño Igualitario
Cazarabet conversa con... Ana Aguado,
coautora del libro "María
Cambrils. El despertar del feminismo socialista (biografía, textos y contextos)"
(Universitat de València)
Un libro
firmado por Rosa Solbes, Ana Aguado y Joan Miquel Amela
que analiza la figura de una mujer que abrió la senda y los ojos al feminismo y
al socialismo….´
Lo edita Publicacions de la Universitat de
València. Dentro de la sección de historia y de sus
estudios feministas
Aquello
que nos dice esta unidad editora:
María Cambrils Sendra (el Cabañal,
Valencia, 1877-Pego, Alicante, 1939), fue una mujer comprometida con el
socialismo y un referente feminista en su época. Sin duda, una de las primeras
y más significativas socialistas que, en los años veinte, analizó la especificidad
de la problemática femenina y la subordinación de las mujeres. El título de su
libro, Feminismo Socialista, es toda una declaración de principios, una
propuesta de acción y de proyecto político, en el que la causa del feminismo se
vincula al socialismo. Este volumen analiza la figura y la obra de Cambrils,
uniendo el estudio de sus referentes biográficos, su pensamiento y sus
propuestas discursivas, a la edición de la gran mayoría de sus escritos -sus
artículos y su libro Feminismo Socialista-, reunidos por primera vez en una
misma publicación.
Los
autores de este libro:
Rosa
Solbes: http://ca.wikipedia.org/wiki/Rosa_Solbes_L%C3%B3pez
Algunos
artículos escritos por esta periodista, estudiosa e investigadora:
http://elpais.com/autor/rosa_solbes/a/
http://opinions.laveupv.com/abelard-munoz/blog/3562/rosa-solbes-periodista
http://www.ciudaddemujeres.com/articulos/_Rosa-Solbes_
Interesante
sobre Rosa Solbes:
https://feministasvalencianas.wordpress.com/rosa-solbes/
Ana
Aguado, catedrática de Hª Contemporánea de la Universidad de Valencia: http://www.uv.es/iued/somos/aguado-ana.htm
Nos
acercamos a Joan Miquel Almela. http://www.llibresvalencians.com/Joan-Miquel-Almela-Cots_va_17_109_0.html
El
retrato a María Cambrils: http://es.wikipedia.org/wiki/Mar%C3%ADa_Cambrils
http://elpais.com/diario/2003/02/09/domingo/1044766360_850215.html
Cazarabet conversa con Ana Aguado:
-En el caso de María Cambrils ¿estamos ante una mujer que siente antes
la ideología socialista que el feminismo; que es ante todo mujer
reivindicativa, o va todo como a la par
siendo como un viaje que emprende en aquellos años tan difíciles para
reivindicar el feminismo como las ideas socialistas?
-María
Cambrils fue una de las primeras y más significativas mujeres socialistas
españolas que, en los años veinte y treinta reconoció la especificidad de la
problemática femenina y la situación de subordinación de las mujeres. El título
del único libro que consiguió publicar, Feminismo
Socialista, es en sí mismo toda una declaración de principios, una
propuesta de acción y de proyecto político socialista y feminista, en el que la
causa del feminismo se vinculaba al socialismo, y no se explicaba el uno sin el
otro. María contempló claramente, en los años veinte, la articulación entre
género y clase, tanto de forma teórica como estratégicamente. A pesar de la
evidente presencia de discursos de género tradicionales en las culturas
obreras, en este caso en la cultura socialista, también en ellas se fue
construyendo históricamente, dialécticamente, un discurso específicamente
feminista, aunque éste fuese minoritario y no hegemónico. La biografía y la
escritura de María Cambrils revelan este proceso de construcción de demandas
igualitarias y ciudadanas dentro de la cultura socialista y el feminismo
siempre tendría para María un claro contenido de clase, y sólo lo entendería
vinculándolo necesariamente al socialismo como «ideal de redención para la
mujer».
-¿Podríamos decir que, aunque ella ya tuviese esas
semillas en su interior, no es hasta que a raíz de perder a su primer marido y
de conocer a José Alarcón no da un volantazo a su
vida, agilizando y poniendo rumbo hacia un muy determinado feminismo
socialista?
-No
exactamente, porque una importante y primera influencia en este sentido es la
de su vecina Natividad. María comenzó a
interesarse por el socialismo gracias a las conversaciones que mantenía con su
vecina de la calle Corset de Valencia, Natividad,
esposa y compañera de un obrero de los ferrocarriles, Santiago Borricón. Según
María, Natividad fue la primera que le habló del ideal socialista, y quien la
introdujo en las primeras lecturas de Marx, Ruskin, Jaurés, Pablo Iglesias y Bebel.
De todos ellos, el último, lógicamente, es el que le va a marcar el ideario
feminista, a través de la lectura de su libro La mujer y el socialismo. Tras este primer contacto entre dos
mujeres que la acercó al ideario y el pensamiento socialista, se va a producir
uno aún mayor, el que va a tener con José Alarcón, su pareja sentimental.
-Es además activista directa y de las que deja
testimonio con sus escritos en diferentes medios: ¿cómo fueron las
participaciones de Cambrils en los diferentes medios de prensa?; ¿cómo
podríamos calificar su propuesta en expresión escrita que deja un mensaje, una
proclama, una reivindicación..?
-María
Cambrils es una activista y militante de
la palabra, del discurso, que escribe intensamente en los años veinte en la
prensa obrera, particularmente en la prensa socialista, utilizando la palabra
como arma de combate ideológico, de tal manera que escribe artículos
periodísticos –la inmensa mayoría de ellos, recogidos y ordenados
cronológicamente en nuestro libro-, sobre todo en el periódico El Socialista –donde fue la única mujer
que escribió regularmente en los años veinte-, pero también lo hizo en otras
publicaciones socialistas y republicanas de la época -El Obrero Balear, El
Popular, El Obrero, El Pueblo,
etc. Participó en actos y homenajes, polemizó con las mujeres católicas y
las autodenominadas “neutras” ideológicamente. Publicó en 1925 el libro de Feminismo Socialista. Su pensamiento,
sus planeamientos, sus propuestas, tuvieron, a pesar de encontrarse «en los
márgenes», y desde una ciudad como Valencia, una importante presencia en la
cultura socialista y en la actividad intelectual y política de la sociedad
española de los años veinte. El conjunto de sus textos -como puede comprobarse
en nuestro libro-, son un relevante y magnífico ejemplo de la presencia y la
articulación del pensamiento feminista en la cultura socialista, y del combate
ideológico por ambos.
-¿Podríamos decir que Cambrils
les casi grita a las mujeres para que se hagan con el mando de su propia vida y
que viajen por el camino de la vida como plenas mujeres con todos sus
derechos..?
-Sus
escritos son una llamada constante a las mujeres para que desarrollen su
agencia, su protagonismo individual, mostrando las causas de su situación
subordinada, y animándolas a aproximarse al socialismo como instrumento de
liberación social y de género. Pero sus propuestas y escritos no fueron tan
sólo una apelación a las mujeres para lograr su aproximación al movimiento
socialista, sino que además incorporaron análisis y reflexiones teóricas
específicamente feministas. También, análisis sobre la situación de
subordinación de las mujeres en clave histórica, relacionando el desarrollo del
capitalismo con el patriarcado y sus instrumentos y discursos jurídicos, culturales
e ideológicos –códigos, leyes, religión- para construir los modelos de género
hegemónicos. A partir de este análisis, planteará la necesidad de transformar
esa realidad en clave feminista y socialista.
-¿Qué es aquello que más influyó, de la ideología
socialista, en Cambrils, acaso el concepto de una igualdad plena sin ninguna
línea roja?
-Probablemente,
la extensión y radicalización de los conceptos de igualdad y de libertad para
todas las personas, y su resignificación desde la
perspectiva femenina. Los discursos igualitarios presentes en los lenguajes
políticos de izquierda permitieron, desde su reapropiación o «relectura» hecha
por mujeres de las culturas obreras, articular sus intereses, dar significado a
sus acciones y construir nuevas identidades. Así lo afirmaba al final de las
consideraciones preliminares de su libro Feminismo
Socialista: Nosotras confiamos que la mujer española será también
socialista. No puede ser
otra cosa ni pensar de otro modo si de veras pretende su liberación.
-El socialismo que vivió Cambrils se estaba todavía
construyendo, aunque, en verdad, pienso que las ideologías están o deberían
estar en constante construcción y evolución. ¿qué nos puedes decir? Lo mismo
para con el feminismo, ¿no?
-Los
conceptos y las ideologías son siempre históricos, no tienen una definición
cerrada ni estática, sino que están continuamente en construcción y se van
redefiniendo, y deben situarse en distintos contextos y momentos históricos.
También, por tanto, en este caso, el concepto de socialismo y el concepto de
feminismo, a los que hay que referirse siempre, de forma más correcta, en
plural, y hablar de socialismos y de feminismos. María Cambrils, desde su
contexto, tiene una clara concepción del socialismo como socialismo marxista
pero no leninista ni estalinista. El socialismo entendido como radicalización
de la igualdad pero a la vez de la
libertad, valorando la importancia de la democracia y del voto. Igualmente,
entiende el feminismo como algo que interesa también, y fundamentalmente, a las
mujeres de las clases trabajadoras, profundizando en el concepto de democracia
desde una perspectiva feminista. El concepto de feminismo de María Cambrils
estaba directamente con su forma de entender el socialismo, siguiendo los
planteamientos de Bebel, cuya obra La mujer y el socialismo -traducida del
alemán por Emilia Pardo Bazán-, había leído y conocía. Por otro lado, María
Cambrils fue formulando en los años veinte propuestas concretas de desarrollo
de su programa feminista a lo largo de muchos de sus artículos, pues defendía
su feminismo como un feminismo razonable. Un programa que no se limitaba a
objetivos abstractos y lejanos, sino que planteaba demandas y reivindicaciones
para conseguir a corto plazo: el sufragio, el divorcio, derechos educativos y
laborales para las mujeres, la reforma de la legislación que hiciera posible la
ciudadanía política y civil igualitaria para las mujeres.
-¿Cómo fueron los primeros días de esta activista
feminista y socialista, ya inmersa en esta lucha?
-En el
conjunto de los discursos y prácticas de vida que conformaron la biografía de
María Cambrils, fue la escritura el ámbito en el que se manifestó de forma más
explícita su compromiso socialista y feminista. A pesar de su formación
autodidacta, fue una de las escasas mujeres que escribieron artículos de
opinión política en la prensa española en el primer tercio del siglo XX. Una
práctica discursiva que transgredía tanto por la forma –escribir con firma
propia- como por el contenido –planteamientos y propuestas feministas- el
modelo hegemónico de feminidad. Desde 1924 comienza a escribir en la prensa
obrera, especialmente en El Socialista.
No cobra por sus artículos, pues todas las publicaciones con las que colabora
son muy precarias económicamente, la mayoría órganos de distintas agrupaciones
socialistas (El Mundo
Obrero, de Alicante; El Obrero de Elche, El Popular de Gandía; El Pueblo de Valencia y El Pueblo de
Salamanca, El Obrero
Balear, Revista Popular...etc.). Así,
María Cambrils realizo constantes aportaciones económicas para que El Socialista comprase imprenta propia y
la conversión del semanario en diario, incluyendo los beneficios de su libro Feminismo Socialista. Los años de 1924 y 1925 son los de mayor
intensidad en la publicación sus de artículos y también participando en algunos
actos y conferencias, denunciando actuaciones de la derecha católica, pero
sobre todo, dando a conocer sus reflexiones y propuestas socialistas y
feministas.
- ¿Cómo una mujer de su amplitud
de miradas y sensibilidades afronta una dictadura como fue la de Primo de
Rivera?.
-Fue
precisamente a partir de 1923 cuando tras el desarrollo del asociacionismo
femenino en España tras la Primera Guerra Mundial, y en medio del debate
internacional sobre el sufragio, la dictadura de Primo de Rivera necesitaría
dar algunas respuestas ante el avance de «la cuestión femenina» y tomar algunas
medidas controladas desde el conservadurismo católico para ampliar su base
social, y miró hacia las mujeres presuponiendo el apoyo femenino. El régimen
quería dar una imagen internacional de modernidad, y dado que otros países de
Europa que comenzaban a reconocer el sufragio femenino, su Estatuto Municipal
de 1924 introdujo un primer y reducido reconocimiento de la capacidad electoral
femenina, que sería aprovechado por los sectores femeninos vinculados a Acción
Católica –María de Echarri, etc.-, contra los que polemizaría María Cambrils en
la prensa socialista. Es evidente su vinculación y contactos con la Agrupación
Femenina Socialista de Madrid, a través de la cual le pediría a Clara Campoamor
que realizase el prólogo de su libro. María defendería en sus artículos la
acción de la AFS de Madrid y sus actuaciones en defensa de las escuelas laicas
frente a la Iglesia y los «elementos clericales» que controlaban los recursos
educativos desde los poderes públicos, desde el Ayuntamiento de Madrid. Un
Ayuntamiento en el que en estos años de la Dictadura de Primo de Rivera eran
concejalas María de Echarri y Celsia Regis como
suplente, tras la aprobación del Estatuto Municipal en 1924 por el que por
primera vez accedieron al consistorio mujeres vinculadas al conservadurismo
católico. La actuación de María de
Echarri en el ayuntamiento, proponiendo retirar las subvenciones a las escuelas
obreras laicas, fue denunciada repetidamente por María Cambrils en El Socialista. Pero la dictadura de Primo de Rivera se
caracterizó por una férrea censura de prensa, particularmente de toda la prensa
obrera, expurgando y prohibiendo la publicación de artículos y de publicaciones
no afines, que en estos años se llenaron de espacios en blanco por los
artículos censurados. De hecho, en 1926 y 1927 disminuyó la publicación de
artículos de María Cambrils, que vuelven a publicarse de nuevo con más
regularidad en 1928.
-Supongo que la Segunda República, esa
"Segunda República de las mujeres" fue algo que la atrapó entre la
ilusión, el trabajo, las iniciativas, pero también la reflexión/reflexiones.
-Fue con
la Segunda República, a partir de partir de 1931, cuando las mujeres pudieron
ejercer de forma universal el sufragio en elecciones legislativas y
municipales: la República iba a ser, entre otras cosas, la República de las
ciudadanas, a pesar de que en 1931 todavía la sociedad española estaba inmersa
en un sistema de género profundamente tradicional. La aprobación del artículo
36 de la Constitución republicana, que reconocía la ciudadanía política
femenina, no fue fácil. Pero el desarrollo de propuestas discursivas
igualitarias y/o feministas, existentes desde los años veinte y desde la
Primera Guerra Mundial, se plasmaría en estos años en un amplio programa
político que había ido elaborándose de forma intermitente a lo largo de
momentos anteriores, y que contemplaba múltiples objetivos. Entre ellos, conseguir para las mujeres la
plena condición de ciudadanas, conseguir su emancipación de la tutela de la
Iglesia, y para los y las socialistas, como María Cambrils, conseguir aumentar
la vinculación femenina a la causa socialista y los principios igualitarios.
-¿Cómo afrontó Cambrils el voto femenino? porque en
su día, este hecho levantó mucha polvareda y a este tema le dedicó uno de sus
últimos artículos en el año 1933.
-María
Cambrils fue una enérgica defensora del sufragio femenino, calificando de
misóginos a los que se oponían a la igualdad de derechos políticos y laborales
entre mujeres y hombres. «El voto femenino» fue uno de los últimos artículos
que María Cambrils escribió, en 1933, y precisamente lo hizo sobre el derecho
de las mujeres al sufragio como sujetos de ciudadanía política, y como
componente fundamental de la democracia republicana. En él diría: Es ya un
tópico manido eso de decir que el Parlamento español ha cometido una solemne
torpeza al incorporar a nuestra Constitución el postulado feminista de la
igualdad electoral para los dos sexos. Quienes califican de torpe una tan
equitativa medida de derecho civil son los misóginos de siempre, aquellos que
admiten como muy acertado el viejo dicho: “La mujer en casa con la pierna
quebrada”. Sus planteamientos
sufragistas son, como representante del pensamiento feminista presente en la
cultura socialista – y por extensión, en las culturas obreras-, parte
integrante de la historia de la ciudadanía femenina en España, y de los
procesos de democratización política y social de primer tercio del siglo XX.
20187
María Cambrils. El
despertar del feminismo socialista (biografía, textos y contextos) (1877-1939). Rosa Solbes, Ana Aguado, Joan
Miquel Almela (eds.)
424 páginas
22,00 euros
Universitat València
María Cambrils Sendra (el Cabañal, Valencia, 1877-Pego, Alicante, 1939),
fue una mujer comprometida con el socialismo y un referente feminista en su
época. Sin duda, una de las primeras y más significativas socialistas que, en
los años veinte, analizó la especificidad de la problemática femenina y la
subordinación de las mujeres. El título de su libro, Feminismo Socialista, es
toda una declaración de principios, una propuesta de acción y de proyecto
político, en el que la causa del feminismo se vincula al socialismo. Este
volumen analiza la figura y la obra de Cambrils, uniendo el estudio de sus
referentes biográficos, su pensamiento y sus propuestas discursivas, a la
edición de la gran mayoría de sus escritos -sus artículos y su libro Feminismo
Socialista-, reunidos por primera vez en una misma publicación.
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