País de Cazarabet

 

Tras los pasos… de los íberos en el País de Cazarabet (I)

 

 

 

 

image001.jpg¿Quiénes eran los Íberos?

 

Este nuestro territorio, lo que podemos entender como Territorio Cazarabet,  es tierra de Íberos, de una cultura que impregnó la manera de vivir y hacer frente a años y años de convivencia ante conquistas, invasiones, guerras que toman el pulso a aquello que podríamos considerar como un día normal.

Así, podemos afirmar que los Íberos fueron un conjunto de pueblos que ocuparon tierras desde Andalucía hasta el valles del Ródano francés, antes de que hiciesen acto de presencia otros pueblos como celtas y romanos. Los íberos, desde la costa, penetraron al interior por la cuenca de los ríos. Eran amigos de los ríos se posicionaban muy cerca de estos para vivir y para, de alguna manera, expandirse.

 

Esta cultura tiene lugar entre los siglos VI y I a.C. en la vertiente mediterránea de la Península Ibérica.

 

Desde el punto de vista de la arqueología contemporánea: ¿qué podemos considerar por íberos?, “los íberos no forman un solo pueblo ni una entidad política única ni mucho menos una etnia uniforme. Aquello que tienen en común los pueblos Íberos son su cultura, la escritura y muy probablemente la lengua”. Siguiendo este razonamiento, los historiadores creen que : “entre los iberos podrían incluirse los siguientes pueblos: Turdetanos, Oretanos, Bastetanos, Contestanos, Edetanos, Ilercavones, Cessetanos, Layetanos, Indigetes, Lacetanos, Ausetanos, Ilergetes y Sedetanos”. Los estudios afirman que: “es difícil saber cuáles son los límites entre unos pueblos y otros. Así estas diversidades en cuanto a geografía hacen que el clima, los paisajes y los recursos naturales sean también bien variados”.

 

La primera referencia que se tiene de los iberos es a través de los historiadores y geógrafos de la Grecia Clásica, más adelante éstos eran objeto de estudio recurriendo fuentes literarias, epigráficas, numismáticas, y arqueológicas. De esta manera, “si consultamos las fuentes grecorromanas, conocemos a los Íberos como a un grupo de pueblos que habitaban el litoral mediterráneo de la Península y parte del valle medio del Ebro” (la correspondiente a la mitad oriental de Aragón (aunque el vocablo es utilizado también en sentido geográfico a veces, referido genéricamente a los habitantes de toda la Península Ibérica).

 

Íberos e iberización en Aragón.

 

Según la gran enciclopedia aragonesa en Aragón los Íberos se fueron “imponiendo” y expandiendo de la siguiente manera: “Una síntesis del mundo ibérico aragonés, permite en el momento presente situar en su contexto al conglomerado de pueblos que se reúne en Aragón bajo esta rúbrica: ilergetes, suessetanos, jacetanos, cerretanos occidentales, sedetenos y ausetanos del Ebro. En lo cronológico y cultural se admite para el territorio aragonés la periodización aplicada para este ámbito a partir de una etapa pre/protoibérica, Ibérico antiguo, Ibérico pleno e Ibérico tardío  con la fundación de la colonia Lépida. Se constata que la iberización equivale a la asimilación por parte de nuestras poblaciones durante el Bronce Final y la Primera Edad del Hierro, de una serie de influencias externas, de la mano de una progresiva agricultura y de un evidente aumento demográfico. En este sustrato del Bronce Final, la arqueología define varios modos funerarios de necrópolis que configuran tres áreas significativas sobre las que se desarrollará el fenómeno ibérico: necrópolis del Valle medio del Ebro, del área del Cinca-Segre y del Bajo Aragón. En el preibérico son prioritarios los estímulos coloniales del mundo fenicio occidental”.

 

image002.jpg¿Cómo aparecen los Íberos?. El origen de los Íberos.

 

Éste no se sabe con exactitud, aunque hay varias teorías que intentan establecerlo, pero ninguna está comprobada realmente. Se cree que podría ser un origen africano: según esta teoría los iberos proceden de tribus bereberes que se establecieron y fueron extendiéndose por toda la península y por todo el sur de Francia.  En otro orden de cosas señalar que el origen del sustrato cultural local que influenció a los íberos se remonta al primer neolítico mediterráneo. Íberos podría entenderse que son  pueblo de pueblos, formados por los diferentes pueblos que evolucionan desde las diferentes culturas precedentes hacia una serie de estructuras estatales, influenciados por fenicios, griegos y púnicos. Todos estos pueblos aportan elementos que ayudan a la diferenciación de  grupos sociales.

 

¿Cómo estaban organizados socialmente?

 

Se trata de una  sociedad fuertemente jerarquizada por distintas clases sociales muy dispares, todas con una función bien determinada que ayudaba a mantener su ciudad.  Trataremos a continuación de dejar claras los diferentes estamentos sociales: Las sacerdotisas gozaban de gran prestigio por estar en contacto con el mundo de los dioses; otra de las clases era la de los artesanos, apreciados porque de ellos salían los materiales del día a día y finalmente estarían los que se podía llamar " pueblo llano" gente de distintos oficios y trabajos y que se dedicaban a los trabajos más duros. Otro rasgo importantísimo es la lengua Íbera, ésta es una lengua paleohispánica  documentada por escrito con  dos millares de inscripciones. Los textos, en lengua íbera, se pueden leer razonablemente bien, pero en su mayor parte son incomprensibles. Las inscripciones íberas aparecen sobre soportes muy variados: monedas de plata y bronce, láminas de plomo, cerámicas áticas, cerámicas de barniz negro, cerámicas pintadas, dolias, ánforas, estelas , placas de piedra, mosaicos… 

 

Invasiones y los Íberos son, también un pueblo guerrero.

 

Los iberos fueron invadidos por Fenicios, procedentes del norte de África; por  griegos,  celtas, cartagineses (herederos de los fenicios) y romanos. Los Íberos tenían un ejército irregular, reclutado según las circunstancias, Había una fuerte jerarquía entre los que se dedicaban a la guerra; ellos mismos  tenían que procurarse, sus propias armas y protecciones. Las ciudades íberas estaban construidas en cerros altos, lo que era fundamental para la defensa y la vigilancia y constituía una importante ventaja frente a los enemigos e invasores. Las ciudades íberas estaban amuralladas por muros de piedras y adobe, con torres de vigilancia. Algunas de estas ciudades eran muy numerosas en población; tenían casas que solían ser de planta rectangular, de adobe sobre una base de piedras a modo de cimientos. Las ciudades estaban bien organizadas, tenían calles asfaltadas con piedras. Se han encontrado restos de lo que podían ser grandes desagües, restos de morteros de piedras con los que se molía el grano u otros cereales. Cuando las ciudades caían frente al enemigo, la población huía hacia los castillos que tenían como refugios. Tenían un concepto muy alto de  la solidaridad porque las mismas tribus íberas, pertenecientes a diferentes ciudades, solían ayudarse cuando había algún conflicto y esto se podía hacer porque  las ciudades de todas las tribus tenían un contacto constante;  al mando de estas ciudades había un consejo que es el que tomaba las decisiones importantes.

 

image003.jpgYacimientos en nuestras tierras.

 

Nuestro territorio tiene algunos yacimientos importantes  que son objeto de estudio, consideración e investigación por parte de estudiosos, arqueólogos….En este artículo analizaremos tres de estos yacimientos: El Cabo en Andorra; La Guardia en Alcorisa y los yacimientos alrededor de Alcañiz, aunque hay más…en nuestra propia localidad, Mas de las Matas se sabe que había uno, el más significativo, en las laderas del actual emplazamiento de Santa Flora  y es conocido como Camarón (a éste, como a otros emplazamientos ,le dedicaremos otro Km). Las excavaciones de estos yacimientos, nos referimos a los de este territorio y a los la Ruta de los Íberos (Mas de las Matas, aunque ha conseguido encontrar retos, no tiene excavaciones ni lugares al aire libre que mostrar) comenzaron a principios  del siglo XX. Estas excavaciones nos enseñaron aspectos que casi no podemos imaginar en esta cultura.

 

En Mas de las Matas, gracias a intensísimos e interesantísimos estudios llevados a cabo hace bastantes años por miembros del Grupo de Estudios Masinos, se ha podido constatar de la presencia de la cultura íbera, como ya señalábamos. Así se han encontrado huellas y yacimientos en la depresión de Más de las Matas, pero eso lo conoceremos en otros kilómetros en los que además volveremos a hablar de algunas generalidades primero sepamos algo más, en genérico de la cultura ibérica. Eso sí, apuntar que cuando hablemos de los Íberos o Iberos en Mas de las Matas no lo haremos dentro del apartado de Tras los pasos...buscaremos alguna otra sección, ya que no está incluida en la Ruta de los Íberos.

 

Hoy viajamos a Alcañiz, Alcorisa en el Bajo Aragón y a  Andorra y Alloza en la comarca de Andorra-Sierra de Arcos. Alcañiz ,presenta varios yacimientos: El Palao, El Tarratrato y el Cascarujo, como necrópolis, aunque existen otros muchos yacimientos ibéricos parcialmente excavados que no se integran inicialmente en esta Ruta: Cabezo del Moro, Tiro de Cañón, Alcañiz el Viejo, Masada de Ponz, Ermita de San Miguel, Val de las Fuesas, etc. (pero de los que trataremos de ir informando).

 

En la actualidad existe una interesante Exposición permanente de arqueología, con magníficas piezas halladas en Alcañiz y su entorno entre las que destaca un amplio y diverso conjunto de piezas de época ibérica. La Exposición, instalada en el Horno Nuevo de los Almudines, puede visitarse previa petición de hora en la oficina de turismo. En un futuro próximo se ha previsto la creación de un nuevo Centro de Visitantes-Museo en la antigua Iglesia de las Dominicas de Alcañiz.

 

image004.jpgVisitamos, ahora, en este artículo, la zona más elevada del cerro de El Palao, donde se ubicó la acrópolis (como la que se construía en  las ciudades fortificadas en la antigua Grecia); un sistema defensivo ibérico con dos torreones, un pequeño foso con entrada en recodo y niveles anteriores de la I Edad del Hierro. Todo rodeado por un gran muro en época ibero-romana. En el centro del poblado aparece  una gran muralla del siglo III a.C. que fue soterrada intencionadamente, para remodelar toda la zona y construir diversas dependencias dedicadas a actividades comerciales. Destaca especialmente el conjunto de esculturas y estelas funerarias de los yacimientos El Palao y Cabezo del Moro. La sala de exposición permanente de arqueología de Alcañiz forma parte de la ruta temática local " Iberos en el Bajo Aragón". El yacimiento de La Guardia,  se extiende al norte de Alcorisa, en cuyas laderas y cima se encuentran los restos del yacimiento. En la zona llana al pie del cabezo aparecen los restos correspondientes a la ocupación más moderna. Del material encontrado en las excavaciones puede constatarse, según los estudiosos, que el poblado tuvo un largo periodo de vida, que abarca desde el siglo V a.C. hasta la romanización. Uno de los ejemplos más característicos encontrado en este yacimiento es: “el de un vaso en el que, en torno a un árbol de la vida, se arremolinan guerreros o cazadores a caballo, un hombre manejando un arado tirado por dos bueyes, tres jabalíes perseguidos por cuatro perros, y dos parejas de hombres danzando alrededor de una gran ánfora; todo ello ante un fondo repleto de aves y pájaros diversos, y representado con un gran esquematismo, sin atisbo alguno de profundidad ni de perspectiva. Algunos recursos decorativos recuerdan las soluciones de los vasos de Liria: los cuerpos ahuecados, en este caso sobre todo los de las aves, que presentan líneas onduladas como motivos de relleno, aunque en otros vasos pueden ser sustituidos por rosetas y espirales”. El Cabo en Andorra; este poblado ibérico se localizaba a unos dos kilómetros al oeste de la localidad de Andorra. En 1999, fue destruido a causa de una explotación de carbón a cielo abierto. Antes de su destrucción se recuperaron y trasladaron los elementos. Se trata de un poblado de mediados del siglo V a.C. con calle central y unas cuarenta casas rectangulares. El poblado tenía un recinto amurallado con un grueso paramento escalonado en la parte más baja del mismo, torreones defensivos.

 

En el Cerro de San Macario, junto a la localidad de Andorra, se han instalado los elementos arquitectónicos más singulares recuperados del poblado. Un Centro de Visitantes presenta la recreación completa del antiguo yacimiento con didácticas propuestas y forma parte de la ruta temática local "Iberos en el Bajo Aragón". Una de estas excavaciones  se inicia en 1956, prolongándose durante cinco años, en Alloza (El Castelillo, poblado de los siglos III y II a.C.), aparecen casas en laderas y muchas cerámicas pintadas, éstas fueron dos de las principales actividades que impulsaron al pueblo Íbero a ser un pueblo de dinámica actividad comercial. Para la realización de este artículo—para este Km31—que tendrá continuación ha sido crucial la información de diferentes páginas webs sobre los yacimientos  de Territorio Cazarabet. Sin su ayuda e  información la realización de este artículo hubiese sido mucho más difícil.