La Librería de El Sueño Igualitario

vidal.jpgCazarabet conversa con...   José Antonio Vidal Castaño, autor de "La memoria reprimida. Historias orales del maquis" (Universitat de València)

 

 

Una aproximación, una  excelente investigación, desde la metodología de “hacer historia” mediante el testimonio oral, de José Antonio Vidal Castaño al fenómeno del Maquis.

El libro, editado por Publicacions de la Universitat de València hace unos diez años,  lo rescatamos por su excelente factura y por el peso que tiene el testimonio oral en la Recuperación de la memoria Histórica y en el tratamiento de la misma.

Vidal Castaño se reivindica, casi más que nunca, con un trabajo de “puro investigador” donde bucea en el maquis de la mano de los testimonios que todavía “pudo pillar” antes del 2004.

Aquello que nos cuenta, sobre el libro, PUV:

En este volumen se intenta reconstruir una parte del capítulo más doloroso de nuestra historia reciente. Nos lleva los tiempos más duros de la inmediata posguerra en los años cincuenta del siglo XX, a través de hombres y mujeres que combatieron en el movimiento guerrillero y en la lucha clandestina contra la dictadura franquista. La lectura de este libro es, también, una invitación a escuchar unas voces silenciadas, tejidas de recuerdos y de olvidos, de victorias y de derrotas. A través de las historias orales de Florián y Remedios, de Carmen y Leandro, de Esperanza, de Adelino y de Vicente, nos adentramos en una galería de eventos protagonizados por personas que sufrieron el asedio y la ignominia de un régimen totalitario y fascista. Su testimonio, tan sorprendente como veraz, nos permite indagar en la memoria colectiva de todo un pueblo, enriquece el conocimiento de nuestra historia y, al mismo tiempo, nos ayuda a comprender el presente. Este libro pone al alcance de un público amplio, desde el lector curioso hasta la comunidad de educadores e investigadores, un valioso material didáctico expresado con una narrativa peculiar que recuerda, a ratos, la técnica de los más apasionantes relatos de intriga.

 

 

Cazarabet conversa con José Antonio Vidal Castaño:

Exilia.jpg-Amigo José Antonio, este es un libro muy especial porque acercarse al maquis desde la “recopilación” del testimonio oral y el tratamiento de éste también lo es… ¿no?

-Hacer historia oral siempre es difícil. Primero, hay que recoger los testimonios uno a uno y sin otras mediaciones, a ser posible. No vale cualquier testimonio. El verdadero valor es el que le dan los testigos o participantes directos en los hechos que tratamos de explicar. Hoy abundan los trabajos basados en testimonios secundarios e incluso terciarios que, por esta condición o circunstancia, tienen un valor muy relativo, a veces escaso; personas que tienen parentesco ya lejano (nietos, sobrinos, etc.) que no conocieron directamente a los protagonistas, que tan solo oyeron hablar de sus hazañas o desventuras…

Luego se precisa (en parte por las razones expuestas) someter a tratamiento los testimonios. Los testimonios (incluso los directos y primarios) están llenos de lagunas, silencios o medias palabras que debemos intentar encajar en el conjunto del discurso e interpretar. No debemos olvidar que la mordaza ¾a la feroz represión¾ fue el miedo. Hay testimonios prestados con mayor o menor grado de compromiso con la llamada memoria colectiva de un grupo (partido, etc.), o, respuestas incompletas que pueden ocultar tantas cosas como las que nos dicen. Además, están los mecanismos y los vaivenes propios (personales) de la memoria individual. Cabe insistir, en todo caso, en los tabúes partidarios inspiradores, a veces, de silencios o vaguedades… Insisto, el tratamiento es fundamental.

-¿Por qué quedan tantas dudas a lo largo de la historia del maquis…será, en parte, porque la historia la suelen escribir “los que ganan” las guerras o las batallas?; ¿Será, también por el Maquis fue un instrumento del Partido Comunista, sin más…?(creo que “coges” la idea de esta última cuestión)

-Siempre quedarán dudas, lagunas, paréntesis por cerrar, al narrar la historia; en las historias de maquis con mayor motivo. En parte porque los vencedores (en este caso de la guerra, primero, y luego, de las guerrillas) buscan des-informar ocultando pruebas de hechos o sucesos que les puedan avergonzar. Por su parte, la dirección del partido comunista ha venido ofreciendo versiones oficiales que, en no pocos casos, revelan tan solo una parte de la realidad. Por ejemplo, los informes oficiales ocultan que en muchas de las agrupaciones guerrilleras organizadas y dirigidas por el PCE también actuaban socialistas y anarquistas. Los problemas que se derivaron de ello no aparecen recogidos en dichos informes, ni tampoco los conflictos internos entre comunistas que, a veces, se saldaron con “ejecuciones” o “eliminación” física de los disidentes.

-Hablamos de la “instrumentalización” que se hizo de la guerrilla y de sus hombres y mujeres por parte del PC, pero quizás deberíamos pararnos ante el hecho de que “al sistema”, me refiero a la dictadura franquista, también parece que “le interesaba” mantener “tensa la cuerda” con el Maquis y mediante el Maquis….¿Qué nos puedes comentar…?

- Algo hemos dicho ya en la respuesta anterior sobre la instrumentalización de las organizaciones guerrilleras y de su historia por parte del PCE. Los maquis españoles fueron organizados, en su mayoría, por este partido, que libraba entonces una lucha consigo mismo entre los partidarios de seguir al pie de la letra la política dictada por Stalin, por el PCUS y los que estaban en contra de estos dirigentes y métodos. Por eso hubo “traidores”, “ejecuciones”, etc.

No conozco otro interés por parte del franquismo que de acabar lo más rápidamente posible con la resistencia armada. No entiendo, pues, el supuesto interés del régimen por mantener “tensa la cuerda”. Paul Preston aclara en su biografía de Franco (Grijalbo, 1994) que el régimen impuesto por el dictador se mantuvo “en pie de guerra y no vaciló en evacuar áreas enteras para llevar a cabo tácticas de tierra quemada (…) Apenas puede sorprender, por tanto, que en el presupuesto del Estado de 1946 ¾y años subsiguientes, aclaramos¾ el 45% estuviera dedicado al aparato de represión: policía, Guardia Civil y Ejército.”

La guerrilla, al parecer, no quitó el sueño a Franco pero el régimen se sentiría incómodo con el maquis hasta bien entrado 1951. A partir de esa fecha siguen habiendo resistentes pero no ya resistencia organizada y menos dirigida por el PCE. Franco se sentía, no obstante, más agobiado por la presión política que le venía del exterior por parte de las potencias democráticas. Menos, a partir de la declaración firmada en 1946 por los Estados Unidos, Gran Bretaña y Francia, pues aún persistiendo en su condena política, frases como la que sigue eran más tranquilizadoras: “No tenemos intención alguna de intervenir en los asuntos internos de España. El mismo pueblo español es quien, a la larga, debe forjar su propio destino.”

image002.jpg-Mira nosotros, los de Cazarabet, habitamos en territorio del AGLA y aquí el Teniente Coronel de la Guardia Civil, Manuel Pizarro puso en marcha una lucha contra el maquis que podríamos llamar “de rodillo” o de “tierra quemada”. se llegó al extremo de exterminar una manera de vivir que querían tener o que pretendían tener los habitantes de las Masías: se les obligó a abandonar las masadas y de esta manera iban a vivir al pueblo y a trabajar las tierras teniendo que recoger las llaves del Mas por las mañanas y  dejarlas cuando volvían del trabajo….claro, de esta manera para muchos masoveros la actividad desarrollada alrededor de La Masía se fue dejando….o simplemente muchos ya la abandonaron de entrada….y muchas de esas propiedades fueron a parar, a muy buen precio, a “los caciques de siempre” …Otra manera de retener el poder, por parte de “la derecha”, aunque sea un “efecto colateral”. ¿Qué piensas…?

-El que acabó siendo general, Manuel Pizarro fue el conductor de las operaciones represivas que pusieron fin a las actividades de la AGLA. Su política contra-guerrillera puede ser calificada de exterminadora. Era amigo personal de Camilo Alonso Vega, director general de la Guardia Civil que, a su vez, era íntimo amigo de Franco. Su cuartel general quedó establecido en la ciudad de Teruel y desde allí organizó la “guerra sucia” contra el maquis en toda la zona de Levante, tal y como lo había hecho anteriormente en Granada.

El alejamiento de los masoveros de sus lugares de trabajo y forma de vida formaba parte de este plan que pretendía cortar de raíz la colaboración y ayuda que estos y sus familias, como enlaces, prestaban a los guerrilleros. Les alimentaban, servían de estafeta o correo, les alojaban por la noche en sus casas, etc. Sacarlos de las masías, además de que favorecía a los caciques, ponía trabas a la comunicación de los masoveros con los maquis.

-Los informadores, los enlaces… ¿qué papel, verdaderamente, crees que jugaron por el Maquis?

-El papel de los informadores o colaboradores, de los enlaces del maquis, fue de suma importancia. Su cometido fue doble: por una parte informar, es decir, dar cuenta de los movimientos y presencias amenazadoras, y por otra la de acoger, esconder a los guerrilleros, e incluso apoyar algunas de sus acciones, etc. Puede decirse que eran de absoluta necesidad, pues sin ellos no existiría la guerrilla. Las personas ¾en muchos casos mujeres como “La Madre” en Cofrentes¾ que ayudaron a la guerrilla como enlaces fueron fundamentales para mantener la lucha y las actividades de los núcleos de resistencia armada. Sin su trabajo y sacrificio el maquis no hubiese sido posible. Así de sencillo y heroico a la vez.

-Pero, a la vez, eran utilizados, informadores y enlaces,  como “moneda de cambio”, ya que eran muy castigados por la Guardia Civil y escarmentados…entrando en el chantaje de todo tipo, lo que marcó a familias, amistades...y hasta varias generaciones más acá… ¿cómo lo ves?

-Sin embargo ¾enlazando con la anterior respuesta¾ el papel de los enlaces no ha sido suficientemente reconocido. Se les olvida o se les cita como algo anecdótico cuando su papel fue decisivo. Con el paso del tiempo y cuando tomaron conciencia de los escasos resultados de su labor y de la inutilidad de su sacrificio, fueron presa del desencanto y en algunos casos se convirtieron en delatores o confidentes de la Guardia Civil. El trabajo de las “contrapartidas” dirigidas por la Guardia Civil  y de sus especialistas era el de ejercer todo tipo de presión para ganarse a los enlaces: sobornos, promesas de no ser detenidos o de ser absueltos de cualquier delito de rebelión; “garantizando” a los enlaces, e incluso a los maquis dispuestos a cambiar de bando, impunidad total por aquellos “delitos” que hubiesen cometido. En un porcentaje muy elevado eran falsas promesas. En mi libro: La España del maquis (1936-1965), que pronto aparecerá editado por Punto de Vista, explico con mayor amplitud estas cuestiones.

image008.jpg-También hubo, había: traiciones, intrigas, versiones que se contradicen, se solapan…casi se pisan y esto “no lo cura” ni el testimonio tan directo como el oral….¿Por qué?

-Los testimonios orales reflejan muchas veces intrigas y pasiones en el mundo de los maquis que no son recogidas por los libros de historia ni por las memorias al uso.  Tampoco abundan en la reflexión y los análisis de las contradicciones internas en la dirección del movimiento guerrillero. Razones tales como el cansancio o  el tomar conciencia de la imposibilidad de derrotar al franquismo pueden ser confesadas, pero raramente son explicadas.

-¿Por qué ese tratamiento, siempre por parte de la Guardia Civil y “lo oficial”, de que el maquis y la lucha guerrillera eran actos de bandalaje antes que tratarlo, como todos sabían, eran actos políticos?

-- Era de interés primordial para la dictadura y, por ende, para sus fuerzas represivas (Guardia Civil, Falange, Ejército, etc.) el ocultar que su lucha contra el maquis tenía raíces políticas. Por eso se utilizó la palabra “bandolero” para nombrar a cada uno de los resistentes, y se calificó de “actos de bandidaje y terrorismo” a las actividades o acciones guerrilleras,  como demuestra, por ejemplo, el caso de Losa del Obispo (Valencia), u otros casos similares.

-José Antonio, ¿puede que este libro tuyo, La Memoria Reprimida, sea el que tiene como más carácter de ese reportero, de esa especie de cronista que llevas dentro….que creo que muchos historiadores llevan dentro…?

--Sí. Mi libro La Memoria reprimida (Publicaciones Universidad de Valencia, 2004) tiene algo de reportaje de investigación, sobre todo en su primera parte donde se utiliza una narrativa similar a la periodística en torno a lo sucedido en Losa del Obispo. Pero el libro es muchas más cosas. Las entrevistas, por ejemplo, difieren de las periodísticas, que suelen ser breves y concisas. En este caso, son entrevistas son largas y están planteadas desde la perspectiva de contar “historias de vida”, es decir, remitir a cada persona entrevistada a revisar y resumir su pasado de manera global y no solo su experiencia como guerrillero. Una cosa lleva a la otra.

Me pareció una metodología más apropiada para un libro de historia que busca adentrarse en la memoria y los recuerdos. Luego está la parte que aborda el tratamiento de las entrevistas que tiene poco de periodístico, y menos el capítulo dedicado a introducir la preocupación teórica por  los conceptos que giran en torno al complejo asunto de la memoria colectiva. La metodología empleada se apartaba de la simple transcripción de testimonios para abordar un camino menos trillado. Con el tiempo el libro ha ido ganando audiencia, siendo citado por algunas publicaciones de universidades anglosajonas interesadas por las entrevistas y su tratamiento.

-En las conversaciones sobre los libros que divulgamos desde La Librería de Cazarabet-El Sueño Igualitario….lo que perseguimos es conversar sobre el tema del que va el libro, pero sin desgranar demasiado al mismo…sin hurgar demasiado en  algunas cosas del libro porque, también aquello que buscamos, es que nuestro lector “se enamore” del libro y se haga con su lectura, pero esta vez se me hace inevitable preguntarte, eso sí sin pasar de la “primera narración” en donde te paras la de “Losa del Obispo, caso abierto” .  ¿Por qué crees que circulan varias versiones o estilos aún viniendo del propio lado, la de la Guardia Civil y del régimen?; ¿Le faltaba a la guerrilla el “como divulgar” su propia versión…o entraba dentro de la normalidad que estuviera esto como “resuelto” así…?

- Ninguna de las partes implicadas en el asunto de Losa tenía motivos para divulgar o hacer bandera de una verdadera tragedia humana que arrojó un resultado de ocho muertos. El régimen no pudo ocultar el suceso, que apareció en la prensa valenciana (cosa excepcional) aunque tratado como un vulgar asunto criminal. Pero no tenía ningún interés para ellos reconocer que los maquis operaban a tan solo sesenta kilómetros de la capital, lo que ponía en entredicho su eficacia profesional y su discurso político por la paz. Los maquis, por su parte (en este caso la dirección del 11 sector de la AGLA) tenían sus motivos para no alardear del asunto Losa. Concebida como una operación de castigo, no salió como estaba previsto. Las declaraciones que me hizo, respecto a esta acción, Florián García “Grande”, Jefe del sector en aquellos momentos, eran lo suficientemente ambiguas como para interpretar que no estaban orgullosos de sus trágicas consecuencias.

 

 

vidal.jpg1734
La memoria reprimida. Historias orales del maquis. José Antonio Vidal Castaño   
284 páginas       16 x 24 cms.
20.00 euros
Universitat de València




Este volumen intenta reconstruir una parte del capítulo más doloroso de nuestra historia reciente. Nos lleva desde los tiempos más duros de la inmediata posguerra hasta los años cincuenta del siglo XX, a través de hombres y mujeres que combatieron en el movimiento guerrillero y en la lucha clandestina contra la dictadura franquista. Su lectura es, también, una invitación a escuchar unas voces silenciadas, tejidas de recuerdos y olvidos, de victorias y derrotas. A través de las historias orales de Florián y Remedios, de Carmen y Leandro, de Esperanza, de Adelino y de Vicente, penetramos en una galería de acontecimientos protagonizados por personas que padecieron el asedio y la ignominia de un régimen totalitario y fascista. Su testimonio, tan sorprendente como veraz, nos permite adentrarnos en la memoria colectiva de todo un pueblo, enriquece el conocimiento de nuestra historia y al tiempo nos ayuda a comprender el presente. Este libro pone al alcance de un público amplio, desde el lector curioso hasta la comunidad de educadores e investigadores, un valioso material didáctico envuelto en una narrativa peculiar que recuerda, en ocasiones, la técnica de los más apasionantes relatos de intriga.

 

 

 

_____________________________________________________________________

LA LIBRERÍA DE CAZARABET - CASA SORO (Turismo cultural)

c/ Santa Lucía, 53

44564 - Mas de las Matas (Teruel)

Tlfs. 978849970 - 686110069

http://www.cazarabet.com/lalibreria

http://ww.cazarabet.com

libreria@cazarabet.com