61-yWi6G0tL.jpgCazarabet conversa con...   Antonio García Tabuenca, Ion Martínez, Miguel Laparra, David Prieto, Chema García-Pablos, Pedro Costa Morata y Francisco Domouso, coautores del libro “Mario Gaviria. Pensamiento, obra y proyección” (La Catarata)

 

 

 

 

 

 

 

 

Antonio García Tabuenca, Francisco Domouso y José María García –Pablos como coordinadores miran y reflexionan sobre aquello que nos dejó el sociólogo Mario Gaviria que marcó época, tiempo y ritmo desde la sociología, el medio ambiente, el pulso con lo ecológico…

La sinopsis del libro, aquello que se nos explica:

Esta obra nace con la ambición de hacer un repaso de las múltiples facetas de la vida y obra de Mario Gaviria con textos breves de familiares, amigos y colaboradores participantes en algunos de sus distintos proyectos y equipos. Se busca retratar a Mario a través de su trabajo, que es como hacerlo a través de su persona, porque lo que interesa es que se difunda y materialice el pensamiento y la obra de Gaviria. Esa obra no está ni debe quedar encapsulada en un tiempo y una época, sino que tiene actualidad y, sobre todo, proyección, gracias al discurso fronterizo, transversal, sutil que subyace en la obra de Mario y que sirve de pegamento matricial de todos los textos que componen este libro.

 

En esta misma editorial La Catarata, Mario Gaviria publicó con José María Perea Soro “El paraíso estancado”.

41Yk7eLzP8L._SX333_BO1,204,203,200_.jpgOs dejamos, aquí su sinopsis: El Paraíso estancado aborda dos cuestiones clave para España y Europa en las próximas décadas: ¿cómo entender y afrontar en el siglo XXI una economía, una demografía y una sociedad estancadas, cuya tendencia ha dejado de ser el crecimiento? ¿Cómo resolver, con los medios tecnológicos e industriales disponibles, la dependencia energética de los combustibles fósiles, máximos causantes del agravamiento del cambio climático, y evitar los inasumibles riesgos de un accidente nuclear como los de Chernóbil y Fukushima? A favor de un desarrollo de las energías renovables y desde una clara oposición a la energía nuclear, sus autores constatan la necesidad de repensar la economía y muestran que la consolidación del estancamiento, lejos de proyectar un aciago escenario de futuro, es indisociable de los modelos posibles de transición económica y energética. Alemania quizá esté encontrando, sin explicitarse como tal, un nuevo camino que es a su vez económico, social y medioambiental. Una especie de postcapitalismo donde prevalece la economía real sobre los movimientos de capitales. Los autores creen que Alemania, por su población, su desarrollo económico e industrial, el nivel de su Estado de bienestar, sus políticas respetuosas con el medio ambiente y su centralidad e influencia política en el continente, del Atlántico a los Urales, es clave para entender la nueva Europa que está emergiendo en estos años marcados entre la ciudadanía por el doble miedo ante la crisis económica y las consecuencias del cambio climático. Una nueva Europa en la que España, por sus potencialidades, dotaciones en infraestructuras y desarrollo de las energías renovables, puede aprovechar la complementariedad hispanoalemana.

El autor, Mario Gaviria: Sociólogo. Realizó sus estudios en Sociología, Derecho y Economía y completó su formación universitaria en Inglaterra y Francia. Reconocido por sus aportaciones en sociología urbana y rural, así como del ocio y del turismo y de intervención social, estuvo muy vinculado al movimiento y desarrollo del pensamiento ecologista, especialmente en su lucha contra el modelo energético nuclear y en su defensa de planes de diseño para el desarrollo e implantación de las energías renovables. Por esta labor recibió el Premio Nacional de Medio Ambiente en 2005. Sus últimas publicaciones fueron La buena vida, las energías renovables y la reislamizacion fría en el 2030 (2011), El trasvase del AVE (2010), junto a José María Perea.

https://es.wikipedia.org/wiki/Mario_Gaviria

 

 

Cazarabet conversa con Antonio García Tabuenca, Ion Martínez, Miguel Laparra, David Prieto, Chema García-Pablos , Pedro Costa Morata, Francisco Domouso:                 

15-homenaje-mario-gaviria-760.jpg-Amigos, ¿era muy necesaria una reflexión sobre la obra, el pensamiento y la proyección desde la persona de Mario Gaviria?-Desde ¿qué punto y por qué era y es tan importante el pensamiento de Gaviria? 

Responde: Antonio García Tabuenca

-El punto de importancia del pensamiento de Gaviria versa en la provocadora relevancia que aporta al hecho u observación que propone (o le proponen) examinar, y al método de análisis que desarrolla, que transita entre la ortodoxia y heterodoxia, un método propio, autónomo, acusado, seductor. [En sus orígenes estaba el basamento analítico de Henri Lefebvre, los estudios realizados en la Universidad de Estrasburgo, la formación libre que adquirió en la London School of Economics, y como profesor visitante en universidades de Estados Unidos (UCLA y Pensilvania)]. El hecho estaba ahí, pero nadie lo había visto o no lo había visto desde su perspectiva; tampoco se le hubiera ocurrido a nadie abordarlo del modo que lo hace. Pero lo significativo es que Gaviria transmite a los demás [a los miembros de sus equipos multidisciplinares o a sus interlocutores], la observación a considerar y el método autónomo de una manera simple, fluida y, a su vez, a impulsos creativos que no paran de crecer conforme sale la palabra, de él mismo o de los debatientes. Fastuosa integración entre la observación–la idea-la palabra-la descomposición heterodoxa– el análisis anticipatorio-y la conclusión, hecha esta última de materiales tangibles e intangibles. Sus "conclusiones, resultados y recomendaciones" los aporta desde la literatura científica, profesional o activista, sea clásica o la más emergente, y desde la experimentación práctica (la encuesta, la entrevista...); estos resultados (a menudo, parcialmente) los cuantifica –de ‘elaboración propia’–, con poderosa imaginación y perplejidad que se asoma a la realidad plausible, y que se afianza casi siempre en el medio plazo.

El por qué, es por su originalidad de enfoque, su anticipación en el tiempo, por el método incitante y pausado que emplea en el análisis y el diagnóstico, algo así como fuera de las coordenadas al uso en el planteamiento y argumentación de un tema nuevo. Entre la dialéctica del conocimiento, de la palabra y de la práctica o experimentación.

-Pensamiento y obra, ¿no? Háblanos, por favor, de este último punto, su obra…-Como sociólogo, ¿qué ha aportado directamente a este campo? 

Responde: Ion Martínez

-De una forma esquemática puede dividirse la obra de Mario entre, en primer lugar, los trabajos de crítica urbanística -reivindicando la participación ciudadana y el derecho a un espacio de calidad para todos los usuarios- y vinculados al territorio -articulando las dimensiones urbana y rural-, en segundo lugar, los trabajos relacionados con el ecologismo y particularmente con la lucha antinuclear, y, finalmente, los trabajos dedicados a estudiar y combatir la exclusión social. Desde la década de 1960, la obra de Mario cumple con una labor de introducción de debates y análisis que ya se venían produciendo en otros países y que él comienza a elaborar de forma destacada en Madrid, Benidorm, Extremadura, Aragón y Navarra, siempre a partir de un trabajo empírico -de inmersión: sobre el terreno y de larga duración- en el que incorpora a multitud de investigadores -que hoy distinguiríamos como juniors y seniors- y con una pretensión de formación, agitación y transformación social. Fruto de este trabajo serían obras fundamentales como: en 1968, el estudio sobre El Gran San Blas; en 1971, Campo, Urbe y Espacio del Ocio; en 1974, España a go-go: turismo chárter y neocolonialismo del espacio; en 1976, El Bajo Aragón expoliado, recursos naturales y autonomía regional; en 1978, Extremadura Saqueada. Recursos naturales y autonomía regional; en 1979, El espacio de la fiesta y la subversión: análisis socioeconómico del Casco Viejo de Pamplona; en 1981, El buen salvaje. De urbanitas, campesinos y ecologistas varios; en 1995, La caña y el pez: el salario social en las Comunidades Autónomas 1989-1994; en 2009, El salario social sudado; y, finalmente, en 2015, El Paraíso Estancado.

2017032115093395815.jpg-Gaviria vio antes que otras y antes de que se visionasen para el común de los mortales muchas de las problemáticas que se arropan en torno a la gestión del agua y a las políticas en gestión de aguas?

Responde: general

-Claro, se anticipó muy pronto. En su trabajo Navarra Abundancia (Ed. Hordago, 1978), en el estudio de la Cuenca del Guadiana, dentro del proyecto Extremadura Saqueada (Ruedo Ibérico, 1978), y otros posteriores discurrió y ofreció reflexiones e ideas nuevas para mejorar la comprensión de este indispensable recurso natural, el agua, y su gestión. La vieja lucha y contradicciones entre el dominio público y privado: la propiedad del agua, los agricultores y ganaderos, los consumidores-industriales y los consumidores-hogares; y el papel de las Confederaciones Hidrográficas...

-Gaviria es sinónimo de compromiso y de “ser un adelantado y un visionario”…fíjate en el año 1973 cuando  eran pocas---comparadas con ahora—las voces que se posicionaban en contra de la energía nuclear…Gaviria era una voz crítica con la energía nuclear…

Responde: Antonio García Tabuenca

-En efecto, fue pionero junto a unos pocos más (Allende, Costa, entre otros) con lo que retroalimentó el análisis y forjó un camino sin retorno, Empleó el análisis comparativo de la energía nuclear en el mundo desarrollado, sobre todo en Francia, y argumentó, alertó y denunció tempranamente el peligro, el riesgo, nuclear. Consiguió y estudió la documentación disponible, y entrevistó a algunos de los agentes con responsabilidad en la energía nuclear. Debatió en programas de prestigio social y cultural en TV, como La Clave. Sus ideas anticipatorias, además de su compromiso personal con los movimientos sociales y políticos que fueron forjándose, sirvieron sin duda al parón de la Central de Valdecaballeros (Estudio de Extremadura Saqueada, con Naredo y Serna), de Lemóniz, de Tudela...

El parcial derretimiento de un reactor en Three Mile Island (Pensilvania) en 1979, o el desastre de Chernóbil (1986), a los que tanto se refirió Gaviria -con Juan Serna y otros activistas- como "el desastre incontrolado nuclear", renovaron y afianzaron el movimiento antinuclear en el mundo desarrollado, y lo ancló definitivamente en España. Crítico contra la energía nuclear y defensor de las energías alternativas desde finales de la década de los 60 hasta el día que se marchó en 2018. Más de medio siglo de estudio, pelea, difusión, convencimiento...

-Las problemáticas ecológicas en sus reflexiones ocupan un lugar de preferencia y él es de los que tiran del carro y se adelante con sus preocupaciones que hace “de todos y de todas” con sus reflexiones, libros, artículos… 

Responde: Antonio García Tabuenca

-Incansable, predicador divertido y moral -no espiritual, ni samaritano- del ecologismo comprometido, asociado a la 'buena vida', a la defensa de la naturaleza y sus recursos, siempre tirando de equipos -apoyando, enseñando, dando responsabilidades-, de proyectos encargados por las AAPP o entidades más sensibilizadas, produciendo materia impresa, informes, libros, artículos, entrevistas. Premio Nacional de Medio Ambiente (2005). Referencia indispensable. 

2018040715593588029.jpg-¿Qué compañeros de viaje encuentra en este viaje de compromiso ecológico? Además llama al ecologismo activo, ¿no?, anima a ello… 

Responde: David Prieto

-Si por algo se define la trayectoria de Mario Gaviria es por la colaboración. Es difícil hacer un listado en el que no queden de lado importantes compañeros de luchas a lo largo de las casi siete décadas en las que se mantuvo activo. Simplemente echando un ojo a su obra escrita da pistas de la cantidad de personas que acompañaron su proceso de reflexión. Desde sus compañeros y alumnos en el Seminario de Sociología Urbana con sede en Madrid, luego ampliado hacia la Sociología Urbana, Rural y del Ocio, con sede en un Benidorm en el que se firmó el Manifiesto que da forma a las primeras reivindicaciones desde el ecologismo social. Pasando por los compañeros de la Ebro’s University (que denominaba Ángel Delgado), un sin fin de militantes ecologistas, sociólogos de base acompañaron y dieron sentido a su tarea pionera.

-Las políticas de la gestión del agua con los planteamientos de diferentes trasvases e ideas de trasvases, ¿Qué relación, según los pensamientos de Gaviria, guardaban con las centrales nucleares?

Responde: general

-Las Centrales nucleares y la gestión del agua (bajo domino público y los intereses de las grandes eléctricas) son elementos integrados en la farsa que denuncia Gaviria. Los trasvases encubren a menudo esta farsa, bajo la ingenua proposición de dar agua a la cuenca que carece de ella..., detrás están el dominio público-privado defensor de la energía nuclear. 

-Explotación y expolio del territorio eran de las cosas que más preocupaban a Gaviria

Responde: Miguel Laparra

-Desde una perspectiva muy propia de la Ecología Humana, el territorio era para Mario Gaviria, por un lado, un condicionante para el desarrollo de las relaciones sociales; pero también era la expresión y el resultado de las contradicciones sociales. Por eso, en una sociedad con profundos desequilibrios y contradicciones, con relaciones muy desiguales entre unos y otros grupos, se producen usos y abusos del territorio que no dudo en calificar de “saqueo” o “expolio”. En el análisis concreto de estas dinámicas, le interesaba especialmente destacar dos cosas: 1. Que en esas estrategias desarrollistas hay sectores sociales que pierden, que se ven expropiados de sus modos de vida tradicionales. 2. Que esas alteraciones sustanciales del equilibrio territorial van a condicionar a futuro las posibilidades de un desarrollo económico y social alternativo más justo y equilibrado. No sólo se trata de una contraposición de intereses de unos grupos frente a otros, sino que puede ponerse en cuestión el interés general del conjunto de la sociedad.

import_15664397_1.jpg-Además Gaviria mira y pregunta sobre la analítica urbana y el urbanismo más allá de las ciudades y de las “grandes urbes”, ¿no? porque las ciudades son resultado de lo que son…. 

Respuesta: Chema García-Pablos

-La apuesta de Mario por la gran ciudad como espacio de libertad -que no de caos- y en el caso concreto de España por la conveniencia de formación de megaurbes frente al disperso indiferenciado -tanto en las regiones urbanas como en el espacio turístico-, no le desviaron de su atención a investigar la diversidad en las formas y escalas del sistema de asentamientos en el territorio: el espacio periurbano metropolitano, los procesos de vaciado, saqueado y desertización del campo, las ciudades medias, los cascos viejos o las comarcas rurales como lugares de identidad,... Su pensamiento sobre las controversias campo-ciudad, centro- periferias, compacto-disperso, segregación-integración, ... se mantiene hoy con plena vigencia. 

-¿Leyendo las reflexiones de Gaviria se puede entender más y mejor sobre el fenómeno en torno a la  despoblación? 

Respuesta: Miguel Laparra

-Sin duda, esa lectura de los desequilibrios y las contradicciones sociales que se plasman en el territorio nos permite un análisis en clave política de los factores, las causas y los intereses que han potenciado el desarrollo económico y demográfico de ciertas zonas mientras se abandonaban otras a su suerte. 

Pero la concentración de la población en las ciudades (siempre que estas sean habitables y se gestionen con criterios ecológicos) y la existencia de grandes territorios despoblados puede leerse también, en clave gaviriana, como un elemento de oportunidad con el mantenimiento de amplias zonas preservadas para la recuperación de la vida natural. Es la teoría de la acumulación de impactos como producto de una concepción dialéctica de la dinámica social.

-¿Creéis que Gaviria, desde su particular visión, era de los que pensaba que, de alguna manera, algunos territorios se han vaciado o se ha facilitado su vaciado para poder hacer de ellos lo que se quiere porque entre otras cosas no queda gente que levante la voz disonante? .- Además que eso repercutía en la sociología de las ciudades a las que se puebla mucho con todas las repercusiones que eso conlleva : muchas personas para una presión sobre las ciudades y el terreno bestial; más contaminación y peores condiciones de trabajo porque a más mano de obra, esta suele ser ¿cómo diríamos? Más “maltratada” por el poder…

Responde: Ion Martínez

-Centrándonos particularmente en el análisis de las consecuencias urbanas de ese desequilibrio territorial, que supone el éxodo rural y la inmensa concentración de población en las ciudades, Mario tendía a enfocarlo desde un optimismo antropológico, subrayando que las ciudades han podido ser la encarnación de los males de nuestra sociedad (concentración de malestares múltiples, contaminación, explotación, violencia, etc.) pero también han sido y pueden ser la solución a esos problemas. Incluso, no olvidemos, las consideraba el mayor invento de la humanidad. La densidad poblacional urbana, que pudiera resultar un mal a ojos de muchos, Mario la interpretaba como una virtud que permite la gestión eficaz de servicios para millones de habitantes, reducir el impacto territorial de la acción humana, así como la mezcla, diversidad y simultaneidad de usos, entre los que también se hayan la capacidad de organizar y responder ante los malestares que experimentan esos millones de habitantes (jóvenes sin vivienda, mujeres y minorías étnicas discriminadas, trabajadores precarios, pensionistas que no llegan a fin de mes, etc.).

video-thumb-for-20698-1.jpg-De sus ideas, reflexiones y planteamientos críticos y constructivos ¿qué ha ido calando más y de qué manera?; ¿quién o quienes ha ido o han ido tomándole más la palabra a Mario Gaviria? 

Responde: Antonio García Tabuenca

-En general, Mario influyó de manera más acusada en Sociólogos, Arquitectos, Economistas, Trabajadores Sociales, líderes sociales, representantes de asociaciones agrarias, y tierras comunales..., pero también en Ayuntamientos, alcaldes, concejales, Gobiernos regionales, y tuvo influencia su pensamiento en acciones específicas de responsabilidad del Gobierno de España. Su paso por la Universidad Pública de Navarra dejo huella en el ámbito de los Trabajadores Sociales. El libro "Mario Gaviria, pensamiento, obra y proyección", que sirvió de base para la presentación Homenaje a Gaviria, que se celebró en el Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid (15 noviembre 2018), así como el acto que se hizo en Tudela (9 de junio de 2018), recoge autores y colaboradores de los trabajos y equipos más conocidos o cercanos a Mario, en diversas etapas de su vida, desde finales de los sesenta hasta recientemente. Sin embargo, no están todos, algunos bien importantes en la composición de Gaviria no pudieran participar o prefirieron no hacerlo; unos pocos también, entre ellos José Miguel Iribas -clave en el extenso desarrollo de Benidorm- murieron hace algún tiempo. El acto de Tudela fue recogido parcialmente en una monografía de Encrucijadas, Revista Crítica de Ciencias Sociales, Vol. 15, 2018, i1501; puede accederse al contenido y Biobibliografía de Gaviria en: file:///C:/Users/Antonio/Downloads/450-1034-1-PB%20(1).pdf 

-En torno a la tecnología hace una diferenciación entre cierto equilibrio tecnológico…no todo el progreso tecnológico es bueno, ¿no?... es crítico, a su manera, también sobre esa efervescencia tecnológica que ahora ha llevado a plantearnos muchos interrogantes sobre la obsolescencia. ¿Qué nos podéis decir? … ¿Qué tecnología diferente acariciaba el pensamiento de Gaviria?

-Pedro Costa Morata (extraído del libro ‘Mario Gaviria, pensamiento, obra y proyección’) ha recogido algunas de las principales incursiones de Mario en el factor tecnológico. Así, este autor y colaborador de Gaviria (en el campo anti-nuclear o en el de las primeras autopistas de peaje) señala que "con el aire illichiano que, al menos en sus años de mayor intervención en los conflictos ambientales de nuestro país, siempre lo acompañó, y en la estela de E. F. Schumacher y su Small is beautiful, Mario enhebra como síntesis y aportación teórica personal diecisiete rasgos de la nueva tecnología tan deseada como necesaria. Una síntesis que empieza y acaba estableciendo la íntima relación con la naturaleza que esas técnicas, que habrán de favorecer la salud del planeta, deberán respetar, tanto en su constitución (diseño) como en su funcionalidad (autorregulación biológica).  Y que se desarrolla sobre la base de la austeridad de medios, en un mundo de escaseces, que es otro de los principios esenciales de la conciencia ecologista: la tecnología, según esto, ha de ser baja en consumo energético, discreta en el consumo de recursos naturales, sean o no renovables, y siempre optará por materiales locales y, por supuesto, habrá de prever el reciclado y aprovechamiento sistemáticos de esos materiales. No queda fuera de este enunciado la necesidad de que estas técnicas sean durables, con la condena expresa del vicio de la obsolescencia." Conviene resaltar también que Gaviria en sus últimos años, en relación al aprovisionamiento alimentario de seguridad de Navarra y España, se adentró en el conocimiento de la tecnología agroalimentaria, que defendió en diversos foros y ante empresarios del sector. Teoría y práctica engranadas.

_16535989_daaba87e.jpg-¿Qué huella ha dejado Gaviria como docente? 

Responde: Miguel Laparra

-Como prácticamente todos señalamos de una forma u otra, especialmente en el homenaje organizado en Tudela, uno de los mayores méritos atribuibles a Mario Gaviria es su capacidad para hacer “Escuela”; hacerlo además de forma generosa, en la transmisión de conocimiento y en la relación interpersonal entre maestro y discípulo; y hacerlo hace ya décadas con metodologías que ahora desde la pedagogía se dirían innovadoras: aprendizaje basado en proyectos, aplicación concreta en la práctica, formación personalizada,... De la misma forma que en otros aspectos de su trayectoria, también aquí, rechazando explícitamente la Academia, lo hizo de forma heterodoxa, y con resultados geniales a la vista de tantas generaciones formadas.

-Gaviria fue muy prolífico volcando sus investigaciones, estudios y demás en libros ¿Cómo podríamos definir esa trayectoria? - ¿Y cómo articulista? 

Responde: David Prieto

-En una entrevista con Joaquín Soler, en su programa 'A fondo en RTVE' (1976), Mario Gaviria definía el “discurrir e incordiar” como su especialidad. Siempre me decía que él era un “intelectual militante”, define su obra —alrededor de la cuarentena de libros y varios cientos de artículos— “mis libros son caóticos, urgentes”. Su práctica sociológica partía de una profunda carga de lecturas, referencias y datos provenientes de multitud de fuentes. Una concepción del oficio de sociólogo de carácter socio-instituyente y proactivo, nucleada por su compromiso social frente al artificio teórico. Como decía el propio Joaquín Soler en aquella entrevista, fue un “hombre que toca tantas teclas que es difícil clasificarle”. Empezó su carrera volcado en los estudios urbanos, con unos primeros artículos en El Heraldo de Aragón, progresivamente viró hacia los estudios rurales y regionales y fue pionero de los estudios sociales sobre el ocio y el medio ambiente. Sin abandonar nunca estos temas, a mediados de los años 80 se produce un segundo gran giro en su carrera, coincidiendo con su incorporación a la Escuela de Trabajo Social de la Universidad de Navarra. Enfocando su pensamiento y acción a la desigualdad social, la pobreza o frente a los estragos del SIDA y —más tarde, en su última etapa— en torno al islam. 

En definitiva, su trayectoria —como ha señalado Artemio Baigorri— se define en gran medida más por su “olfato empírico” para analizar la coyuntura histórica y “la dialéctica de los hechos nuevos” que por una temática concreta. Ajeno a los departamentos estancos que estructuran el saber académico, Gaviria definía su esfuerzo y vocación verdadera en la búsqueda de “una sociedad confortable, que no gaste mucha energía que no polucione mucho y que no se exploten unos a otros, que sea bastante armónica”.

-Gaviria, ¿qué opinaría, por ejemplo, sobre lo de las gentrificaciones en las ciudades y grandes urbes que se alimentan, y mucho, del turismo? 

Responde: Francisco Domouso

-Pienso que Gaviria vería en el fenómeno de la gentrificación de los centros urbanos como una oportunidad. Me explico. Mario Gaviria nunca desligó el proceso urbano de la realidad económica. En la ciudad del libre mercado, la gentrificación responde a una demanda de ciudadanos que valoran la calidad de la ciudad consolidada. La gentrificación ha sido una constante en la historia urbana: la puesta en valor de una localización termina desplazando a los ciudadanos con menos recursos y modificando las condiciones de vida de los barrios, sobre todo, encareciéndolas. Quizás actualmente hay una mayor sensibilidad a la pérdida de identidad de un barrio, pero a lo largo de los tiempos, los barrios han cambiado muchas veces de identidad y no ha pasado nada. Creo que Mario Gaviria no añoraría casticismos del NODO. Pienso que vería una oportunidad para la ciudad ligada a los grandes flujos de inversión que conlleva la gentrificación. Mario era pragmático: sin recursos (económicos, entre otros), la transformación y la mejora no es posible.

15231311089366580mario_gaviria_NoticiaAmpliada.jpg-Que era un “adelantado su tiempo” a mí no me cabe la menor duda viendo y leyendo sus artículos. Por ejemplo, era en tiempos de efervescencia del automóvil un firme defensor de desplazarse por las ciudades y demás con bicicleta…sobre la movilidad tendría y ya dejó hecho mucho, ¿verdad? 

Responde: Ion Martínez

-Mario fue un pionero de muchas cosas, y también lo fue de la introducción de la crítica al urbanismo funcionalista en España y del uso de la bicicleta en las ciudades. Sus lecturas de Henri Lefebvre y Jane Jacobs, le hicieron constatar el gran problema que suponía el vehículo para la vida de las ciudades, justo en el momento en que las vías de gran capacidad no hacían más que crecer en el interior de las ciudades. A la vez que conectaba puntos distantes, los coches, fragmentan y jerarquizan la vida de los urbanitas. Su amor por la ciudad se concretaba en la exaltación de la acera -aceras anchas, decía, y llenos de ojos, como apuntara Jacobs- y del espacio comercial de cercanía, los bares y las terrazas -cuya colonización del espacio público actual hubiera cuestionado, pero sin renunciar nunca a ellas como elementos virtuosos-. Las aceras, las plazas, los paseos peatonales debían ser pues espacios para la mezcla de funciones y entre diversos, entre autóctonos y visitantes y con vida continua. Ese era uno de los retos de Mario cuando pensaba en las ciudades. En su lucha contra el coche como enemigo de la vida urbana, apostaba sin duda por la bicicleta como medio estratégico. En la década de 1980 impulsó en Pamplona una de las primeras redes de carril bici del Estado, que posteriormente serían desmontadas, volviéndose treinta años después sobre ellas.  Asimismo, no deben olvidarse sus fundamentales artículos “El erotismo de andar en bicicleta por las ciudades”, de 1979, y su continuación, “Elogio de la sensualidad y eficacia de la bicicleta”, de 1994, o una actualización de su visión sobre el tema en el siglo XXI titulada “Somos ángeles con pedales”. 

-Un antes y un después en el pensamiento y la reflexión de Gaviria parte de su paso como Profesor en Bryn Mawr College, en Pensilvania (USA). Desde esa estancia he leído que a él le da un “giro en su perspectiva analítica y vital” de manera que le hace acceder tanto a la  documentación y a la  reflexión teórica que le hará reflexionar sobre los efectos no deseados del “desarrollo”.—aquí esto puede entroncar con sus reflexiones, posteriores en torno a la tecnología y demás, ¿no?-Parece mentira que esto a él le llegase desde su estancia en el país del neoliberalismo y del capitalismo más veloz, ya no tan solo económico también en las formas de trato humano y de sociología…--aunque ,claro está en todos los sitios “cuecen habas” en lo bueno y en lo malo... 

Responde: David Prieto

-El propio Mario Gaviria afirmaba en su intervención en la Asamblea Anual de la Asociación Española de Economía y Sociología Agraria de 1973 —titulada “el desarrollo regional contra la sociedad rural”— encontrarse en “un momento de crisis teórica y metodológica profunda”. Efectivamente señala el punto de inflexión en su estancia en Estados Unidos. A partir de la documentación que obtiene en Pensilvania y California arma los primeros artículos sobre “Los peligros de las centrales nucleares”, punta de lanza del movimiento antinuclear en el Estado Español, publicados en el Diario de Navarra y en el periódico Andalán. 

No parece chocante que fuese en Estados Unidos dónde encuentre información de primera mano sobre los efectos no deseados del desarrollo, y en concreto sobre el lado oscuro de la energía nuclear. En aquel momento apenas empezaba a expandirse la estructura nuclear civil en España, mientras Estados Unidos “estaban abandonando” aquello que “aquí nos parecía lo moderno”. No solamente pudo traer informes empíricos, sino reflexiones teóricas clave en el surgimiento de los estudios sobre el medio ambiente y el ecologismo (Dennis Meadows y “los límites del crecimiento”, Barry Commoner, George Borgstrom o Edward Goldsmith) y pudo conocer de primera mano la potente contracultura que proliferaba en el país tras las revueltas de los años 60. A finales de esa misma década y tras el accidente nuclear de Three Mile Island (1979), Gaviria se mantenía optimista sobre las enseñanzas que podría extraer la clase política española de la norteamericana, en la que parecía asumirse “una cierta ética ecologista”.

-¿Cómo fueron, amigos, sus días de jubilado muy activo siempre y de manera  reivindicativa? 

Responde: Antonio García Tabuenca

-Fueron días creativos, de intelectual y trabajador incansable de conocimiento y diagnósticos, tanto o más que antes de su enfermedad degenerativa. Tal vez un Gaviria algo más intimista, tal vez aún más cercano y acertado, si cabe. Trabajó en los últimos años en el impacto y paradojas de la inmigración musulmana en Navarra y Europa. Todo ello en el contexto de su aportación crítica a la crisis económica última que publicó, junto a José María Pereda, en un nuevo libro "El paraíso estancado (Catarata)". La pregunta que se formulaba es ¿se está islamizando Europa? Y su respuesta es que ya casi no tiene remedio. Aventuró, incluso, que con el paso del tiempo y la re-reconquista española (y europea) por parte del Islam, muchos europeos emigrarían a Latinoamérica, lugar seguro y basado en nuestros mismos principios culturales. Asimismo, en los últimos tiempos de despedida, las Bardenas Reales de Navarra, pegadas a su casa de Cortes, fue solaz refugio de emociones (¿lo fue toda su vida?) e imaginario personal y colectivo. "La Negra (una parte de la Bardena), decía, es un territorio de enorme belleza y valor natural, como pocos..., un espacio privilegiado para turistas y viajeros en busca de paisajes inéditos". Se quedó a medio trabajo un plan turístico y de desarrollo para las Bardenas. Un día de aquellos, Patxi Tuñón fue con la Directora General de Turismo del Gobierno de Navarra para que lo conociera y valorara. ¡Habrá que recuperarlo! Al caer la tarde del verano bardenero, que toma un tono rojizo-anaranjado, entre nubes rayadas, iba a hacer fotos con Jorge Eliecer que, junto a sus hijas y hermanos, fue su apoyo y último colaborador, a veces les acompañaban sus nietos algunos amigos. No perdió comba prácticamente hasta un par o tres días antes de su muerte. Una anécdota en sus últimas fechas: en su habitación de una clínica de Zaragoza, cuando el doctor le dijo que su enfermedad se complicaba y apenas tenía ya recorrido de vida, Mario le espetó con su fino gracejo: Doctor, le pido que me dé un mes de vida para terminar un libro que tenía ya muy avanzado..."

 

 

_____________________________________________________________________

Cazarabet

c/ Santa Lucía, 53

44564 - Mas de las Matas (Teruel)

Tlfs. 978849970 - 686110069

http://www.cazarabet.com

libreria@cazarabet.com