Cazarabet conversa con... Miguel Pajares, autor de “Refugiados climáticos. Un gran
reto del siglo XXI” (Rayo Verde)
La
Editorial El Rayo Verde nos adentra en una reflexión llena de reflexiones que
nos hará, como no, pensar y nunca mejor dicho, reflexionar, pero que,
inevitablemente, nos estrella ante la realidad de muchísimos refugiados
presentes y de los que tienen que venir o de los que seremos
Todas y
todos somos y seremos, aunque no queramos ser conscientes, parte del cambio
climáticos y por tanto, en mayor o menor medida,,
parte del cambio climático desde las migraciones que vienen y van y de las que
siempre participamos.
El autor
Miguel Pajares nos pones los puntos sobre las íes y a su manera, casi sin
querer, nos saca no pocos colores.
El libro
forma parte de la colección de Rayo Verde, Ciclogénesis,
coordinada por Cecilia Carballo, politóloga con más de veinte años de
experiencia en desarrollo sostenible, es directora de programas en Greenpeace
España y vicepresidenta de Alianza por la Solidaridad. También imparte docencia
en diferentes cursos de postgrado sobre sostenibilidad, desarrollo, RSCS y
relaciones internacionales.
Aquello que
la editorial El Rayo Verde nos acerca del libro:
La Covid-19
nos ha mostrado lo vulnerables que somos cuando la naturaleza responde a los
daños que le hacemos. Sin embargo, la amenaza que ha supuesto está en una
escala muy inferior a la que representa el cambio climático. Lo que este trae
consigo es la desertificación de grandes zonas, la perdida de enormes
extensiones de cultivos, la disminución del agua potable disponible, la subida
del nivel del mar y unos huracanes cada vez más destructivos. Todo ello
producirá importantes movimientos de población, tanto desplazamientos internos
como migraciones. Este libro muestra la dimensión de los impactos climáticos y
analiza en profundidad los desplazamientos y las migraciones climáticas que ya
están produciéndose y las que pueden producirse en las próximas décadas. Un
análisis que está hecho región por región, centrado en varias regiones de
África, de Asia y de Latinoamérica. Además, el libro se adentra en el dilema
sobre la consideración de refugiadas que han de tener las personas que huyen de
los impactos climáticos, y formula propuestas, tanto para la lucha contra el
cambio climático, como para la gestión de las migraciones.
El autor,
Miguel Pajares Martín: Es licenciado en Ciencias Biológicas y Doctor en
Antropología Social. Es también miembro del Grupo de Investigación sobre
Exclusión y Control Social de la Universidad de Barcelona, done también
participa en la elaboración de estudios europeos para la European
Social Research Unit.
Actualmente es presidente de la Comisión Catalana de Ayuda al Refugiado. Fue
uno de los responsables de SOS Racismo, dirigió la estructura sindical de los
CITE, Centros de Formación para trabajadores Extranjeros, así como asesor
externo del Comité Económico y Social Europeo. Es también autor de: Cautivos,
La luz del estallido, Aguas de venganza y Crímenes de hambre; además de varios
libros de ensayo y de numerosos artículos publicados en revistas especializadas
y en medios de comunicación, que se centran en problemas como la inmigración,
el asilo, los derechos humanos o la lucha contra el racismo.
Su web: http://www.miguelpajares.com/
Cazarabet conversa
con Miguel Pajares:
-Miguel, ¿qué es lo que te llevó a escribir Refugiados
climáticos?
-Llevo
muchos años tratando el tema de las migraciones, creo que 30 ya, y hace tiempo
que comenzó a interesarme el impacto que tiene y tendrá el cambio climático
sobre ellas. Cuatro años atrás me propusieron participar en un estudio
académico sobre este tema, que después no se realizó por falta de financiación,
pero yo ya estaba lanzado y seguí con ello hasta que se convirtió en el libro
recién publicado.
-Hoy por hoy, y
desde hace bastantes años, ya hay un gran porcentaje de migrantes, de gentes
que se desplaza, directa o indirectamente, por razones climáticas. ¿Lo podemos
afirmar así?
-Sí, en mi
libro muestro las migraciones climáticas que ya se están produciendo en las
regiones más afectadas por el cambio climático. Hablo de varias regiones
africanas, de varias asiáticas y de Latinoamérica y Caribe. Pero se trata de
migraciones que van a otros países de la misma región, de modo que apenas nos
llegan al norte global (Europa, Estados Unidos, etc.). Por otra parte, de
momento son mucho más importantes los desplazamientos internos provocados
por el cambio climático que las migraciones. o sea,
quienes principalmente están recibiendo a las personas que huyen de su hábitat
por los impactos climáticos son las ciudades del propio país.
-¿Cuáles son las
principales causas?
-En el caso
de los desplazamientos internos y migraciones que suponen un cambio permanente
del lugar de residencia, las principales causas son los fenómenos climáticos de
generación lenta, tales como las sequías persistentes, la pérdida de
productividad de los cultivos por temperaturas excesivas, la pérdida de
cultivos en los deltas por la invasión del agua marina en los acuíferos de agua
dulce, o el cambio de parámetros que están sufriendo las lluvias, que se
hacen cada vez más torrenciales e intempestivas. También hay desplazamientos
por fenómenos repentinos, como los huracanes, pero estos no suelen dar lugar a
cambios permanentes de lugar de residencia, ya que la gente intenta volver a
reconstruir su hábitat cuando los vientos han amainado o las aguas se han ido.
Sin embargo, estos desplazamientos temporales son los que mejor conocemos en términos
numéricos; por ejemplo, en el año 2019 hubo casi 25 millones de desplazados por
fenómenos hidrometeorológicos repentinos.
-¿De dónde vienen y hacia dónde van o vamos…porque me da que, de alguna
manera, nosotros también migramos y que el cambio climático está detrás?
-Las
migraciones actuales más influidas por el cambio climático se están dando en
las regiones tropicales y, como he dicho, se quedan principalmente en países de
la misma región y, sobre todo, en las grandes ciudades. Pero dentro de unos años,
mucha gente tendrá que salir de esas ciudades, por los impactos del calor, la
escasez de agua potable y la subida del nivel del mar; entonces se producirán
migraciones climáticas de más larga distancia. En nuestro caso, como bien
dices, también migraremos, porque hay un proceso de desertificación en marcha
del sur de la Península Ibérica y del sur de Italia, de modo que también en
Europa se producirán desplazamientos o migraciones climáticas.
-Pero creo que debemos ser conscientes que esto lleva ya mucho tiempo
produciéndose…
-Sí, lo que
lleva tiempo produciéndose es el cambio climático. También los gobiernos llevan
mucho tiempo haciendo acuerdos para frenar el cambio climático, que después
incumplen. A finales de los 70 del siglo pasado ya se hizo la primera cumbre
sobre el tema, y en 1992 se firmó el primer tratado internacional, la
Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático. De modo que hace
tiempo que los gobiernos saben lo que pasa, pero hasta ahora no han adoptado las
medidas necesarias para frenar las emisiones de gases de efecto invernadero,
que son las que están provocando el cambio climático.
-Lo que pasa es que a medida que el cambio climático ha ido
acelerándose…esto se ha desbocado y de una manera bestial…
-En los
últimos 10 años hemos visto impactos que dejan ya pocas dudas sobre el daño que
va a hacer el cambio climático. Los huracanes ya se han intensificado y se
vuelven cada vez más destructivos, las lluvias torrenciales generan
inundaciones cada vez más devastadores, y las sequías... En el Cuerno de África
llevan 10 años de sequías continuadas, algo que antes no había sucedido.
-¿Esta aceleración obedece a alguna fórmula
que tiene que ver con la ciencia matemática?
-Los
climatólogos cuentan con modelos climáticos que van anticipando lo que se nos
viene encima. No es una ciencia matemática, pero ya está claro que el
incremento de la temperatura media global del planeta afecta a todos esos
fenómenos de los que hablaba antes.
-Nos transforma a todas y a todos y nos toca a todas y a todos ser
parte, directa o indirectamente, del fenómeno de la migración por causas
climáticas, aunque no nos lo parezca porque algunas o algunos no hemos cambiado
de casa, pero el clima a nuestro alrededor sigue su cambio y hay gente que
conforma esa sociedad con la que convivimos que sí se ve más afectada de manera
directa…Así que somos parte de alguna manera del cambio climático…
-Somos
parte porque nos afecta a todas y todos de alguna manera y también porque lo
estamos provocando. Formamos parte de una sociedad en la que el consumo
desmesurado está agotando los recursos del planeta. Casi nada de lo que hacemos
es sostenible, ni el consumo de carne, ni la cantidad de viajes que hacemos, ni
la forma en que nos movemos. Especialmente las sociedades más ricas somos las
que estamos llevando al conjunto de la humanidad al desastre. Lo injusto es que
las sociedades que menos responsabilidad tienen, las de menor consumo, son las
que van a verse dañadas en primer lugar, pero al final todas sufrirán las
consecuencias.
-Aunque “ser refugiado” implica otras cosas y las más que menos están
revestidas de no poca incomprensión, ¿verdad?; es como si la empatía hubiese
desaparecido del mapa emocional de las ciudadanas y ciudadanos…
-En las
sociedades europeas ha crecido mucho la xenofobia en las últimas décadas. Se
han desarrollado miedos y rechazos muy irracionales hacia las personas
migrantes y refugiadas. Los gobiernos han desarrollado leyes de extranjería
basadas en la idea de que los inmigrantes son una amenaza de la que tenemos que
protegernos, y han levantado un sistema fronterizo militarizado frente a ellos.
Al mismo tiempo, entre la gente se han desarrollado bulos y estereotipos que
potencian el distanciamiento y la incomprensión. Es necesario desarrollar un
decidido combate contra la xenofobia si queremos comenzar a gestionar con
cierta racionalidad todo lo relativo a las personas migrantes y refugiadas.
-Nosotros causamos o somos parte del cambio
climático y a la vez el cambio climático no parará de hacer que cambiemos…¿es la pescadilla que se muerde la cola?; ¿qué nos puedes
reflexionar?
-De lo que
no hay duda es de que somos los causantes del cambio climático. Los científicos
nos dicen que el calentamiento global que estamos viviendo solo se debe a los
gases de efecto invernadero que venimos emitiendo desde el inicio de la
industrialización, desde que comenzamos a quemar carbón, luego petróleo... No
hay otras causas naturales. A veces se habla de que ha cambiado la radiación
solar, y es verdad, pero ha cambiado a menos en las últimas décadas, o sea que
sin los gases de efecto invernadero estaríamos en una fase de enfriamiento, no
de calentamiento. Somos enteramente responsables. Pero no sé si la metáfora de
la pescadilla que se muerde la cola sirve en este caso, ya que si actuásemos
decididamente contra las emisiones sí que podríamos frenar el cambio climático
-¿Hasta qué punto
es inevitable y desde qué punto se podría y hasta, me atrevería a decir, se
podrí o debería evitar?
-Evitarlo
del todo ya no es posible. Se podría haber evitado si los gobiernos hubieran
cumplido los acuerdos climáticos que comenzaron a suscribir hace 30 años. Pero
sí podemos paliarlo y lograr que sus efectos no sean
tan devastadores como pueden llegar a ser.
-¿Hay demasiados
lobbies que “viven” o mejor dicho “sobreviven” a merced del cambio climático?. Háblanos un poco de ello…
-Creo que
esa es la clave del asunto. Para frenar el cambio climático hay que actuar
contra las grandes corporaciones de los combustibles fósiles, las grandes
empresas automovilísticas, aéreas, agroindustriales... Y también contra las
élites financieras que sostienen todo eso. Y lo cierto es que esas empresas son
muy poderosas.
-¿Cómo te has
documentado para este libro?; ¿y cómo se investiga para un libro como este?
-Bueno...,
lo cierto es que me he documentado mucho. La bibliografía utilizada para este
libro es tan extensa que la editorial me propuso sacarla del texto impreso y
colgarla en la web de la editorial, de modo que se puede consultar incluso sin
comprar el libro. He tratado de basar todo lo que digo en los informes
científicos de los grandes centros de estudio y, sobre todo, de los
organismos de Naciones Unidas.
-Luego, cuando lo
tienes todo reunido, ¿cómo lo trabajas o qué método de trabajo utilizas?,
explícanos, por favor…
-No sé si
tengo un método muy claro. Lo que tengo es un esquema de las cosas que quiero
abordar, un esquema que, más o menos, acaba siendo el índice del libro. Y para
ir desarrollando cada parte del esquema, voy buscando información, libros,
estudios... La verdad es que para escribir este libro he leído muchísimo.
-Amigo Miguel, ¿nos
puedes explicar en qué andas trabajando ahora?, ¿nos puedes dar alguna pista?
-Seguir
escribiendo, sin duda. En los últimos diez años he escrito sobre todo novela.
Ya tengo cuatro novelas publicadas. Antes había escrito ensayo y este último
libro también es de ensayo. Puede que el próximo vuelva a ser una novela.
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