35058269_1699188413496083_2.jpgCazarabet conversa con...   David Guirao, ilustrador

 

 

 

 

 

-David, cuéntanos, ¿qué nos ofreces en esta exposición en la Sala Virtual de Cazarabet?

Un repaso a mi trayectoria como ilustrador, hay desde literatura clásica a ilustración infantil y juvenil

-Te acercas a La Celestina, la casamentera  de Fernando de Rojas, ¿qué es lo que te motivó a ello?

La editorial Anaya me ofreció ilustrar La Celestina dentro de su formidable colección Clásicos Hispánicos y dar una visión actual del clásico y me resultó un reto difícil pero muy estimulante

-En el caso de El Quijote, me da que es esa fuerza que irradia el recuerdo de los párrafos de Cervantes que hablan y narran a su manera sobre afrontar el día a día, siempre como si se tratase del último momento, del último instante. Habla mucho de exprimir cada minuto, saciar los tiempos, nunca perder el tiempo. ¿Qué nos puedes decir?

Es el paso del tiempo lo que yace en la obra de Cervantes. Creo que las escenas que se alejan de los tópicos más expendidos del Quijote es lo que para mí lo hizo más apasionante

¿Qué te atrae de “los clásicos”?

Realmente es más difícil, por lo menos para mí, ilustrar un clásico que una obra contemporánea, eso de dar un nuevo enfoque o una visión distinta a una obra que todos conocemos hace que el esfuerzo conceptual sea muy elevado, también es cierto que cuentas con una obra literaria que te ofrece muchos caminos para elegir. Por eso son clásicos eternos.

dguirao1-480x270.jpg-Después expones ilustraciones que has tenido a bien compartir desde tus diferentes colaboraciones con Ana Alcolea. ¿Cómo fue colaborar con esta contadora de historia tan particular?

La obra literaria de Ana es profunda, reflexiva y consigue que entres en sus libros y no quieras apartarte de ellos hasta que los terminas, yo me siento un privilegiado al tener los textos de Ana, antes que el lector para aportar un detalle o un gesto que refuerce o amplifique lo que cuenta Ana.

-Supongo que muy diferente a como trabajas sobre obras en las que ni Fernando de Rojas, ni Miguel de Cervantes te pueden decir nada…

Uno cuando ilustra tiene que ser fiel con el relato, con el texto, no necesariamente con el escritor. A mí me gusta establecer diálogo con los escritores, claro y después de ilustrar sus libros he establecido una bella amistad con la mayoría de los escritores que he ilustrado. Con los clásicos obviamente es más difícil, pero ante todo hay respeto por su literatura.

-¿Una frase, amigo, .Estoy hablando de una simple frase, te puede inspirar a la hora de ilustrar un libro?

Un ilustrador es como un funambulista que camina sobre un alambre y si se cae o resbala, si el texto es bueno es como si uno llevase una cuerda que evita que te estrelles en el suelo.

ilustrador.jpg-¿Te sientes más cómodo pensando en dibujos, ilustraciones o “en colores” para el público infantil o juvenil o por el contrario te sientes como mejor con los libros para el público, cómo te diría, “más mayor” o lo uno no quita lo otro?

Me da igual la edad del público que haya delante de un libro ilustrado. No pienso en ello, pero siento mucho más respeto por el joven lector que por el experimentado, porque ese lector incipiente está mucho menos lleno de prejuicios y puede disfrutar de la lectura de manera más intensa

-Quizás no seamos tan diferentes. No sé, yo  por ejemplo, me siento como pez en el agua con libros y entre libros infantiles y juveniles….Lo que quiero decir que todos guardamos, a muy buen recaudo, cierta piel de la niñez, de nuestra edad adolescente…

El lector que lo fue de pequeño y de adolescente siempre será lector, es prácticamente imposible que un chico de más de 14 años se enganche de repente a la lectura si antes no ha disfrutado de los libros, por eso es tan importante la buena literatura en la infancia.

-Es imprescindible para vivir retener cierto aire de Peter Pan, ¿no?

Es bueno no preocuparse tanto de su propia sombra.

-De todas maneras me da que te agrada mucho jugar con los cielos, las aguas, todos los elementos de la naturaleza…

Pintar con acuarela permite dejarse llevar por lo aleatorio del agua y la pintura.

10462904_683366665062352_5478810212785066798_n.jpg-Y siguiendo con los colores. ¿Eres de los que cogen un color, por ejemplo el verde y los destripa para sacarle todas sus tonalidades?

Cuando pinto, normalmente en acuarela algo de eso si que pasa.

Veo colores y quiero usarlos todos, el color es un valor comunicativo tan potente, que cuando ilustro en blanco y negro siento que me falta algo. Aún así dibujar en blanco y negro tampoco está nada mal

-En cuanto al trazo que dibuja una cara y se acerca a un personaje. ¿Cómo lo logras hacer…simplemente te vas dejando llevar por aquello que te sugiere el texto?

Sí claro, no busco la realidad exacta más bien, busco que el personaje viva en mi cabeza, se comporte de manera natural y que exprese sensaciones y después trato de plasmarlo eso en el papel, no siempre lo consigo

-Amigo, ¿nos puedes explicar en qué estás trabajando ahora?

En un libro de Ana Alcolea, una novela sobre Napoleón, Zaragoza Goya y Los Sitios, un novelón.

 

 

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